El eco-hormigón, piedra angular en la estrategia de descarbonización
21/01/2022
- Este artículo fue escrito originalmente por Dña. Ana Mª Guerrero, Científico Titular del CSIC – Grupo ‘Materiales Ecoeficientes para la Construcción’. Coordinadora – PTI SosEcoCir-CSIC. Instituto Ciencias de la Construcción Eduardo Torroja; para el Anuario 2021 de AEDED.
La Unión Europea está elaborando estrategias y pactos que nos permitan conseguir la neutralidad en términos climáticos de cara al año 2050. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente ha expresado su apoyo al reconocimiento mundial del derecho a un medio ambiente seguro, limpio, saludable y sostenible. En línea con los acuerdos internacionales que se están adoptando para cumplir con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, Pacto Verde Europeo y otras iniciativas y estrategias, los gobiernos, las ciudades y las empresas deben hacer cambios drásticos para que el sector de la construcción y los edificios reduzcan su huella de carbono.
Según estimaciones realizadas por la Agencia Internacional de Energía, las emisiones directas de CO2 de los edificios deberán disminuir, para 2030, en un 50%, y las indirectas de la construcción en un 60%. Para alcanzar este reto, minimizar su impacto en la sociedad y avanzar hacia la neutralidad climática, se necesita articular instrumentos que ensamblen: digitalización, modernización, innovación y competitividad de nuestra economía, haciéndola inclusiva y justa para toda la población.
Es necesario un cambio urgente en nuestra manera de actuar que nos hagan pensar en “la economía circular” como un modo de vida. Es, en este punto, donde el “hormigón” (cemento), material tradicionalmente utilizado en construcción, juega un papel esencial, siendo la piedra angular para conseguir la descabonización real del planeta. El hormigón es ambivalente, por un lado, es centro de las estrategias de mitigación de las emisiones de CO2, y por otro puede actuar como sumidero de dichas emisiones. Actualmente, se están investigando y desarrollando hormigones, o materiales base-cemento “eco-eficientes, sostenibles y circulares” en los que se emplea como materia prima hasta un 70% de material residual proveniente de RCDs, industria papelera, centrales térmicas, lodos de depuradora, etc. Se están utilizando innovadores sistemas constructivos que mejoran la eficiencia energética de los edificios, tanto en obra nueva como en rehabilitación.
Sin embargo, el reto para el corto plazo es la generación de nuevas soluciones innovadoras y de coste efectivo que garanticen un cierre de ciclo óptimo, cuantificable y de calidad que aumente la confianza de materiales “secundarios” en el mercado y en la sociedad. Así como la existencia de protocolos y normativas que respalden la utilización de materiales de construcción en los que la materia prima sea 100% proveniente de los materiales residuales, esto es, eco-cemento o eco-hormigón.
